Segunda Parte: Autoridades de la Nación
CAPÍTULO TERCERO
Atribuciones del Poder Ejecutivo
Art. 99.- El presidente de la Nación tiene las siguientes atribuciones:
1. Es el jefe supremo de la Nación, jefe del gobierno y responsable político de la administración general del país.
2. Expide las instrucciones y reglamentos que sean necesarios para la ejecución de las leyes de la Nación, cuidando de no alterar su espíritu con excepciones reglamentarias.
3. Participa de la formación 
                  de las leyes con arreglo a la Constitución, las promulga 
                  y hace publicar.
                  El Poder Ejecutivo no podrá en ningún caso bajo 
                  pena de nulidad absoluta e insanable, emitir disposiciones de 
                  carácter legislativo.
                  Solamente cuando circunstancias excepcionales hicieran imposible 
                  seguir los trámites ordinarios previstos por esta Constitución 
                  para la sanción de las leyes, y no se trate de normas 
                  que regulen materia penal, tributaria, electoral o el régimen 
                  de los partidos políticos, podrá dictar decretos 
                  por razones de necesidad y urgencia, los que serán decididos 
                  en acuerdo general de ministros que deberán refrendarlos, 
                  conjuntamente con el jefe de gabinete de ministros.
                  El jefe de gabinete de ministros personalmente y dentro de los 
                  diez días someterá la medida a consideración 
                  de la Comisión Bicameral Permanente, cuya composición 
                  deberá respetar la proporción de las representaciones 
                  políticas de cada Cámara. Esta comisión 
                  elevará su despacho en un plazo de diez días al 
                  plenario de cada Cámara para su expreso tratamiento, 
                  el que de inmediato considerarán las Cámaras. 
                  Una ley especial sancionada con la mayoría absoluta de 
                  la totalidad de los miembros de cada Cámara regulará 
                  el trámite y los alcances de la intervención del 
                  Congreso.
4. Nombra los magistrados de 
                  la Corte Suprema con acuerdo del Senado por dos tercios de sus 
                  miembros presentes, en sesión pública, convocada 
                  al efecto.
                  Nombra los demás jueces de los tribunales federales inferiores 
                  en base a una propuesta vinculante en terna del Consejo de la 
                  Magistratura, con acuerdo del Senado, en sesión pública, 
                  en la que se tendrá en cuenta la idoneidad de los candidatos.
                  Un nuevo nombramiento, precedido de igual acuerdo, será 
                  necesario para mantener en el cargo a cualquiera de esos magistrados, 
                  una vez que cumplan la edad de setenta y cinco años. 
                  Todos los nombramientos de magistrados cuya edad sea la indicada 
                  o mayor se harán por cinco años, y podrán 
                  ser repetidos indefinidamente, por el mismo trámite.
5. Puede indultar o conmutar las penas por delitos sujetos a la jurisdicción federal, previo informe del tribunal correspondiente, excepto en los casos de acusación por la Cámara de Diputados.
6. Concede jubilaciones, retiros, licencias y pensiones conforme a las leyes de la Nación.
7. Nombra y remueve a los embajadores, ministros plenipotenciarios y encargados de negocios con acuerdo del Senado; por sí solo nombra y remueve al jefe de gabinete de ministros y a los demás ministros del despacho, los oficiales de su secretaría, los agentes consulares y los empleados cuyo nombramiento no está reglado de otra forma por esta Constitución.
8. Hace anualmente la apertura de las sesiones del Congreso, reunidas al efecto ambas Cámaras, dando cuenta en esta ocasión del estado de la Nación, de las reformas prometidas por la Constitución, y recomendando a su consideración las medidas que juzgue necesarias y convenientes.
9. Prorroga las sesiones ordinarias del Congreso, o lo convoca a sesiones extraordinarias, cuando un grave interés de orden o de progreso lo requiera.
10. Supervisa el ejercicio de la facultad del jefe de gabinete de ministros respecto de la recaudación de las rentas de la Nación y de su inversión, con arreglo a la ley o presupuesto de gastos nacionales.
11. Concluye y firma tratados, concordatos y otras negociaciones requeridas para el mantenimiento de buenas relaciones con las organizaciones internacionales y las naciones extranjeras, recibe sus ministros y admite sus cónsules.
12. Es comandante en jefe de todas las fuerzas armadas de la Nación.
13. Provee los empleos militares de la Nación: con acuerdo del Senado, en la concesión de los empleos o grados de oficiales superiores de las fuerzas armadas; y por sí solo en el campo de batalla.
14. Dispone de las fuerzas armadas, y corre con su organización y distribución según las necesidades de la Nación.
15. Declara la guerra y ordena represalias con autorización y aprobación del Congreso.
16. Declara en estado de sitio uno o varios puntos de la Nación, en caso de ataque exterior y por un término limitado, con acuerdo del Senado. En caso de conmoción interior sólo tiene esta facultad cuando el Congreso está en receso, porque es atribución que corresponde a este cuerpo. El presidente la ejerce con las limitaciones prescriptas en el artículo 23.
17. Puede pedir al jefe de gabinete de ministros y a los jefes de todos los ramos y departamentos de la administración, y por su conducto a los demás empleados, los informes que crea convenientes, y ellos están obligados a darlos.
18. Puede ausentarse del territorio de la Nación, con permiso del Congreso. En el receso de éste, sólo podrá hacerlo sin licencia por razones justificadas de servicio público.
19. Puede llenar las vacantes de los empleos, que requieran el acuerdo del Senado, y que ocurran durante su receso, por medio de nombramientos en comisión que expirarán al fin de la próxima Legislatura.
20. Decreta la intervención federal a una provincia o a la ciudad de Buenos Aires en caso de receso del Congreso, y debe convocarlo simultáneamente para su tratamiento.